La limpieza de la piscina es una de las operaciones más difíciles dentro del mantenimiento de una piscina. El sistema de filtros permite que la suciedad se quede suspendida en el agua, removiendo muy costosamente lo que se deposita en el fondo. Por ello, es fundamental que se cuente con la ayuda del limpiafondos, el cual puede clasificar en tres grupos diferentes que veremos a continuación: manuales, automáticos hidráulicos y eléctricos, todos esenciales para el mantenimiento de la pileta.

 

Limpiafondos manuales

El funcionamiento de estos instrumentos es idéntico al de un aspirador, por lo que necesitan una persona que los utilice. Está compuesta de la cabeza de la escoba, un asa telescópica en aluminio y una manguera flotante. La escoba recoge toda la suciedad acumulada en el fondo y la transporta a el filtro. Uno de los dispositivos manuales más conocido y más útil es el aspirador Venturi. Este aspirador provoca que el agua que entra provoque un vacío en la bolsa de recogida, donde se deposita la suciedad. Su bajo precio es una de las principales ventajas, pero hay que hacer un gran derroche físico para que funcione bien y además, una gran pérdida de tiempo.

 

Limpiafondos automáticos hidráulicos

Su principal ventaja es que son muy fáciles de utilizar, ya que se conectan al skimmer o a la boca que succiona instalada en la propia piscina. Estos limpiadores funcionan cuando se activa la bomba, recoge la suciedad y la libera en el sistema de filtración. Únicamente limpia el fondo de la piscina, por lo que pueden quedar restos de suciedad suspendidos en el agua. Otra de sus ventajas es que no necesita ningún tipo de mantenimiento ni cuidado.

 

 

Limpiafondos eléctricos (robótico)

Este tipo usa una bolsa de filtro que recoge toda la suciedad, la cual está situada en el interior del aparato. Está compuesto por piezas eléctricas que necesitan una fuente de alimentación de 220v. No se implican a los sistemas de limpieza que ya existen en la piscina y se comporta como filtro secundario. Su precio es mucho más elevado que los hidráulicos y que los manuales, pero sus actividades actúan sobre fondos, escaleras y paredes verticales, dando resultados muy difíciles de conseguir por parte de las clásicas operaciones manuales para la limpieza de la piscina. El rendimiento que se consigue con este tipo de aparato es mucho más efectivo que cualquier otro.